«La verdad no depende del sufragio universal. Un buen Gobierno no se opone a que el conocimiento aumente, pero jamás puede legítimamente determinar lo que es verdadero o bueno. Si el poder público impone como verdad sus opiniones, destruye la libertad»
Continuar leyendo “Ignacio Sánchez Cámara, “Totalitarismo débil”, ABC, 9.III.2011”
Categoría: 5 Autores
Rafael Navarro-Valls, “Clima artificial de pánico moral”, El Mundo, 21.III.2010
Un tribunal de la Haya decidió en julio de 2006 que el partido pedófilo Diversidad, Libertad y Amor Fraternal (PNVD, siglas holandesas) , “no puede ser prohibido, ya que tiene el mismo derecho a existir que cualquier otra formación”. Los objetivos de este partido político eran: reducir la edad de consentimiento (12 años) para mantener relaciones sexuales, legalizar la pornografía infantil, respaldar la emisión de porno duro en horario diurno de televisión y autorizar la zoofilia. El partido acaba de disolverse esta misma semana. Al parecer, ha contribuido decisivamente la “dura campaña” lanzada desde todos los frentes, internet incluido, por el sacerdote católico F.Di Noto, implacable en la lucha contra la pedofilia.
Continuar leyendo “Rafael Navarro-Valls, “Clima artificial de pánico moral”, El Mundo, 21.III.2010″
Juan Manuel de Prada, “Celibato y pederastia”, ABC, 20.III.2010
Si mañana se declarase una plaga que asolase un continente entero y se descubriera que en una región determinada cuyos pobladores practican la dieta vegetariana tal plaga también se ha declarado, aunque con mucha menor virulencia, a nadie en su sano juicio se le ocurriría deducir que si la plaga no ha respetado a los pobladores de dicha región es precisamente porque son vegetarianos. Por el contrario, se deduciría que la dieta vegetariana, aunque no inmunice contra el contagio, lo hace mucho más improbable; y se concluiría que, si unos pocos pobladores de dicha región han caído víctimas de la plaga que devasta el continente entero, es más bien porque los hábitos alimenticios menos saludables de regiones limítrofes han corrompido la dieta tradicional que los pobladores de dicha región habían mantenido inalterada durante siglos.
Y, para combatir la plaga, no se condenaría la dieta vegetariana, sino que, por el contrario, se trataría de deslindar cuáles son los hábitos alimenticios menos saludables que fomentan su propagación.
Continuar leyendo “Juan Manuel de Prada, “Celibato y pederastia”, ABC, 20.III.2010″
Juan Manuel de Prada, “Antiabortistas a la cárcel”, ABC, 19.XII.2009
Pues ahí lo tenemos: el aborto convertido en derecho; esto es, en bien jurídico amparado por la ley, que a partir de hoy se ocupará de velar por su protección efectiva y de remover cualquier obstáculo que trate de impedir su libre ejercicio. ¿Y qué son los médicos que invocan la objeción de conciencia para negarse a perpetrar un aborto o las universidades que se niegan a enseñar las técnicas para perpetrarlo, sino obstáculos que la ley se encargará de remover? Sospecho que ni siquiera los detractores de la nueva ley son capaces de vislumbrar su verdadero alcance: un médico que, a partir de hoy, rechace su participación en un aborto invocando la libertad de conciencia se convertirá ipso facto en un delincuente; y lo mismo le ocurrirá a una universidad que invoque la libertad de cátedra para excluir de su programa académico la enseñanza de las técnicas abortivas. Porque ni la libertad de conciencia ni la libertad de cátedra pueden ser baluartes contra el ejercicio de un derecho; y eso es el aborto a partir de hoy: el derecho a exterminar vidas inocentes porque nos da la real gana, en un acto de libre disposición. Y quien se oponga a la consecución de ese derecho será llamado, desde hoy, criminal.
Continuar leyendo “Juan Manuel de Prada, “Antiabortistas a la cárcel”, ABC, 19.XII.2009″
Rafael Navarro-Valls, “Matar al mensajero” (sentencia sobre los crucifijos), El Mundo, 4.XI.09
Un Tribunal tiene la última palabra no porque tenga siempre la razón, sino más bien tiene la razón porque es la última instancia. Conviene tener presente esta elemental verdad para no convertir cada sentencia del Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) en una especie de icono mediático, que merece adoración indiscutida.
Juan Manuel de Prada, “Afrentosos crucifijos”, ABC, 9.XI.2009
Por paradojas del azar, la conmemoración de la caída del murito de Berlín ha coincidido con una sentencia del sarcásticamente llamado Tribunal de Derechos Humanos de Estrasburgo que ordena la retirada de los crucifijos de las aulas. La caída del murito de Berlín supuso, según nos martillea la propaganda, la «victoria de la libertad»; y las consecuencias de esa libertad victoriosa las contemplamos por doquier. La retirada de los crucifijos quizá sea la más aparente, por lo que tiene de simbólica; pero detrás de esa retirada está el suicidio de Occidente, que ha decidido, como los alacranes asediados, inyectarse el veneno de su propio aguijón. Y, en su arrebato de autodestrucción, disfrazado con los bellos ropajes de la libertad, reniega de los logros que han fundado su identidad.
Continuar leyendo “Juan Manuel de Prada, “Afrentosos crucifijos”, ABC, 9.XI.2009″
Julián Marías, “La cuestión del aborto”, ABC, 19.III.2009
La espinosa cuestión del aborto voluntario se puede plantear de maneras muy diversas. Entre los que consideren la inconveniencia o ilicitud del aborto, el planteamiento más frecuente es el religioso. Pero se suele responder que no se puede imponer a una sociedad entera una moral «particular». Hay otro planteamiento que pretende tener validez universal, y es el científico. Las razones biológicas, concretamente genéticas, se consideran demostrables, concluyentes para cualquiera. Pero sus pruebas no son accesibles a la inmensa mayoría de los hombres y mujeres, que las admiten «por fe»; se entiende, por fe en la ciencia.
Continuar leyendo “Julián Marías, “La cuestión del aborto”, ABC, 19.III.2009″
Juan Manuel de Prada, “Nadadores a contracorriente”, ABC, 17.X.2009
Escribía Chesterton que sólo quien nada a contracorriente sabe con certeza que está vivo. Se trata, desde luego, de un ejercicio nada plácido, pues la energía que el nadador a contracorriente emplea en cada brazada no se corresponde con un avance proporcional; y basta con que flojee en su ímpetu para que la tentación del desistimiento haga mella en él. Quien nada a favor de la corriente, en cambio, no tiene que molestarse en bracear; y ni siquiera es preciso que esté vivo, pues la corriente seguiría arrastrándolo como si tal cosa. Las grandes batallas del pensamiento, las conquistas que han ensanchado el horizonte humano, siempre se han librado a contracorriente; y, con frecuencia, quienes se atrevieron a protagonizarlas fueron contemplados por sus contemporáneos como retrógrados, incluso como peligrosos delincuentes. Pero, junto al rechazo o incomprensión de su época, estos pioneros que osaron contrariar el «espíritu de los tiempos» pudieron proclamar con orgullo que estaban vivos; y con su sacrificio irradiaron vida en un mundo acechado por la muerte, convocaron a la vida a quienes por cobardía, por estolidez, por conformidad con las ideas establecidas nadaban a favor de la corriente.
Continuar leyendo “Juan Manuel de Prada, “Nadadores a contracorriente”, ABC, 17.X.2009″
Juan Manuel de Prada, “Educación diferenciada”, Padres y colegios, 18.VI.2009
Acabo de leer Por qué los niños no son niñas (Ediciones Cristiandad), un iluminador ensayo del holandés Koos Neuvel sobre la escuela diferenciada cuya lectura les recomiendo.
Anticiparé que estudié en un colegio mixto, del que guardo un tesoro de recuerdos imborrables; y también que llevo a mi hija a un colegio mixto, del que hasta la fecha no puedo sino predicar bondades.
Continuar leyendo “Juan Manuel de Prada, “Educación diferenciada”, Padres y colegios, 18.VI.2009″
Juan Manuel de Prada, “Retrógrados”, El Semanal, 12.VII.2009
La vicepresidenta Fernández de la Vega ha tildado de ‘retrógrados’ a quienes se oponen al aborto; y, acaso sin pretenderlo, ha dado en el clavo. ‘Retrógrado’, liberado de su carga despectiva, significa ‘que retrocede’. Se puede retroceder por cobardía; pero también por cordura, que es la expresión máxima de valentía. Retrógrados fueron, por ejemplo, los patricios que, en la época de máximo esplendor del Imperio Romano, empezaron a manumitir esclavos. La prosperidad de Roma se asentaba sobre la institución de la esclavitud, protegida por leyes que establecían que los esclavos eran individuos que, aun perteneciendo a la especie humana, no eran ‘personas’ en el sentido jurídico de la palabra; esto es, no se les reconocía capacidad para obligarse, y tampoco los derechos inherentes a tal condición. Los esclavos eran ‘bienes’ en propiedad de sus amos, como pudieran serlo un predio o una vaca; y tal consideración se extendía a sus hijos, pues según el principio admitido por casi todos los pueblos de la Antigüedad, el hijo concebido fuera de justas nupcias seguía la condición que tuviera su madre el día de su nacimiento. Entonces surgieron unos insensatos, inspirados por las predicaciones de unos zarrapastrosos que se proclamaban discípulos de un oscuro rabí galileo, que empezaron a manumitir esclavos, aduciendo que, más allá de los principios jurídicos establecidos por el derecho de gentes, existía un estado de naturaleza que permitía reconocer en cualquier ser humano una dignidad inalienable, nacida de su filiación divina. Y que tal condición natural era previa a su consideración de ciudadano romano, o a las circunstancias en que hubiese sido concebido. Aquellos insensatos causaron un daño gravísimo a la administración del Imperio; pues, al ‘retroceder’ a ese estado anterior a la vigencia del derecho de gentes, erosionaban los cimientos sobre los que se sustentaban el progreso material y la prosperidad de Roma. Cualquier patricio celoso del cumplimiento de las leyes –cualquier patricio ‘progresista’– podría haberlos tildado de ‘retrógrados’, como ahora hace la vicepresidenta con quienes se oponen al aborto. Continuar leyendo “Juan Manuel de Prada, “Retrógrados”, El Semanal, 12.VII.2009″